A finales de febrero, la NASA lanzará la misión SPHEREx, un telescopio espacial diseñado para escanear todo el cielo en 102 colores del espectro infrarrojo. Esta iniciativa aportará datos clave sobre la formación de galaxias, la distribución de compuestos orgánicos en el espacio y la evolución del universo tras el Big Bang.
Telescopios complementarios: SPHEREx vs. James Webb
El SPHEREx (Spectro-Photometer for the History of the Universe, Epoch of Reionization and Ices Explorer) es un instrumento compacto que ofrecerá una visión panorámica del cosmos.
A diferencia del telescopio James Webb (JWST), que observa regiones altamente localizadas con detalle excepcional, SPHEREx capturará una imagen global y precisa del cielo cada seis meses.
Shawn Domagal-Goldman, director interino de la División de Astrofísica en la sede de la NASA, comentó que “tomar una fotografía con el JWST es como tomar una foto de una persona. Lo que SPHEREx y otras misiones de mapeo pueden hacer es casi como pasar a modo panorámico, cuando quieres capturar a un gran grupo de personas y las cosas que están detrás o alrededor de ellas.”
Un lanzamiento con doble propósito
Si el cronograma se mantiene, SPHEREx despegará el 27 de febrero a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX desde la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg, en California.
Compartirá su viaje con la misión PUNCH (Polarimeter to Unify the Corona and Heliosphere) de la NASA, un conjunto de cuatro satélites diseñados para estudiar el comportamiento del Sol y su interacción con el medio interestelar.
Este lanzamiento marcará la tercera reutilización del propulsor del Falcon 9, que voló en la misión Transporter 12 el 14 de enero. El caballo de batalla de Elon Musk regresará a tierra aproximadamente ocho minutos después del despegue, en un procedimiento ya característico de SpaceX.
Mapeando el universo en infrarrojo
El objetivo principal de SPHEREx es estudiar dos tipos de luz cósmica: la óptica y la infrarroja.
Mientras que telescopios como el Hubble captan principalmente luz visible y parte del infrarrojo cercano, el JWST está optimizado para explorar el cosmos en el infrarrojo, revelando detalles ocultos tras nubes de polvo y estructuras distantes del universo.
Es así que, en lugar de competir con las capacidades de estos instrumentos, SPHEREx complementará su trabajo al mapear el cielo con una resolución cromática excepcional.
Durante más de dos años, este mapeo sistemático permitirá identificar estructuras galácticas en diferentes etapas evolutivas, detectar compuestos orgánicos en el espacio interestelar y aportar datos clave sobre la inflación cósmica, el fenómeno que explica la rápida expansión del universo tras el Big Bang.
Un telescopio compacto con una gran misión
SPHEREx está diseñado para ser eficiente y funcional. Pesa lo mismo que un piano de cola y consume menos energía que un refrigerador doméstico. Además, produce más energía de la que necesita utilizando un panel solar.
Por otro lado, para evitar la interferencia térmica del Sol, el telescopio cuenta con un sofisticado sistema de protección contra el calor. Incluye un sistema de blindaje fotónico y paneles radiadores que mantendrán su equipo a temperaturas adecuadas para la observación infrarroja.
Además, su órbita fue cuidadosamente elegida para evitar los efectos del espectro solar.
El costo estimado del proyecto es de US$ 488 millones. Una inversión relativamente modesta en comparación con el JWST, que costó US$ 10.000 millones.
Un legado de colaboración astronómica
Los datos de SPHEREx serán de gran valor para otros observatorios, como Hubble, Webb y el futuro Observatorio Vera C. Rubin, que también realizará un mapeo detallado del cielo en diferentes longitudes de onda.
La combinación de estos recursos permitirá obtener una imagen más completa de la historia y la composición del universo.
“Ningún instrumento por sí solo puede responder todas las grandes preguntas del cosmos”, señala Shawn Domagal-Goldman, director interino de la División de Astrofísica de la NASA. “Es la combinación de observaciones lo que nos permitirá desentrañar los misterios del universo”.
Tras su puesta en funcionamiento, SPHEREx iniciará su primer escaneo del cielo, y los primeros datos calibrados estarán disponibles en un plazo de dos meses.
Para la comunidad científica, el momento más esperado será su primera imagen, una prueba crucial que confirmará el éxito de la misión. Con este nuevo explorador en el espacio, la humanidad está a punto de descubrir aspectos inéditos del cosmos.
Tal vez te interese: El telescopio más grande del mundo, amenazado por un megaproyecto industrial