Fuentes consultadas por el medio South Morning China señalaron que el cuarto portaaviones de la Armada del Ejército Popular de Liberación (PLAN) ya se encuentra en construcción. Esta nueva información se dio en el marco de las reuniones legislativas en Pekín. En esa misma línea, ante las consultas por sobre el tipo de propulsión del nuevo buque capital, el mando consultado de la fuerza naval indicó que pronto se anunciará. Estas declaraciones entonces confirman que la construcción del cuarto portaaviones, el tercero de fabricación nacional, ya esta en curso en los astilleros chinos.
Cabe recalcar que los debates en torno al cuarto buque comenzaron a finales del 2022, cuanto el tercer portaaviones de la Armada de China, el Fujian (CV-18) fue botado y, tras una declaración de China State Shipbuilding Corporation (CSSC), se mencionó la intención romper la barrera tecnológica de energía nuclear para el año 2027.
Por otro lado, la circulación de videos e imágenes en plataformas de comunicación chinas han llevado a suponer que el cuarto portaaviones se estaría construyendo en los astilleros de Jiangnan, ubicados Shanghai.
China ha demostrado un gran avance con el Fujian, el cual ya se encuentra a pocos meses de iniciar las pertinentes pruebas de mar, mientras ser registran evaluaciones en puerto con los sistemas de propulsión y generación de energía, como también en su cubierta de vuelo. En ese sentido, fueron incorporadas catapultas electromagnéticas como nueva características, lo que le permite desplegar y lanzar una mayor cantidad de aeronaves portando además un mayor volumen de carga útil. Ahora cabe la pregunta si este último buque que está construyendo China iría un paso más adelante para convertirse en un portaaviones de propulsión nuclear, lo que le daría una mayor autonomía con una velocidad superior, emulando a sus contrapartes de la Armada de los Estados Unidos.
En la actualidad, solo las armadas de Estados Unidos y Francia disponen de portaaviones nucleares: los estadounidenses de las clases Nimitz y Gerald R. Ford, y el buque insignia francés Charles de Gaulle.
Por último, y no menos importante, la llegada de un cuarto portaaviones a las filas de la Armada de China le daría a la fuerza naval una mayor capacidad de proyección marítima y de respuesta global. Sumado a ello, el gigante asiático también está desarrollando cazas furtivos de nueva generación para poder aumentar su capacidad bélica y llegar al objetivo de ser una potencia militar de alcance global para el 2050.
El más reciente presupuesto de defensa de China, anunciado el martes, representa un aumento con respecto al año anterior del 7,2%, manteniendo el mismo porcentaje de incremento del año anterior. Este aumento tiene como objetivo potenciar la preparación para el combate y fomentar la investigación y desarrollo en el ámbito de la defensa.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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