El Secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, comunicó recientemente que lamentaba la decisión de su homólogo chino, Dong Jun, de suspender las conversaciones militares pendientes. Según lo comunicado por el Pentágono, la reunión que se esperaba llevar a cabo en la cumbre de Laos fue rechazada por Beijing, accionar motivado por las recientes ventas de armas estadounidenses a Taiwán.
En palabras de Austin, la decisión de China es “un revés para toda la región”. “Es lamentable. Afecta a la región porque la región realmente quiere vernos a nosotros, dos actores significativos en la región, dos potencias significativas, hablar entre nosotros, y eso tranquiliza a toda la región”, declaró en las primeras reuniones de la La Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) sobre seguridad en Vientiane.
China no realizó comentarios sobre su decisión de no reunirse con Austin, por lo que Estados Unidos continuó con su agenda. El funcionario ha conversado con sus homólogos de Australia y Japón. Allí se comprometieron a apoyar a la ASEAN, ya que se encuentran preocupados “por las acciones desestabilizadoras en los mares de China Oriental y Meridional, incluida la peligrosa conducta de la República Popular China contra buques filipinos y de otros Estados ribereños”.
Las implicancias de una reunión cancelada y los motivos detrás de la decisión
Los dos días de reuniones de la ASEAN son cruciales para los países participantes, que incluye a los miembros de la Asociación y otras Naciones, como Estados Unidos, China, Japón, Corea del Sur, India y Australia. Principalmente, el objetivo de estas reuniones de seguridad se materializa en “mejorar la cooperación de la ASEAN en materia de defensa y gestionar los desafíos de seguridad en el presente y futuro”, en palabras del ministro de Defensa de Laos, Chansamone Chanyalath.
Pero más allá de los encuentros, los miembros de la ASEAN junto a China han estado negociando un código de conducta para regir el comportamiento de las partes en el Mar disputado. Los funcionarios han acordado intentar completar el código antes de 2026, pero las conversaciones se han visto obstaculizadas.
En este contexto, Estados Unidos ha tratado de impulsar el diálogo y la cooperación entre China y la ASEAN, inicialmente mediando entre las partes por las zonas en disputa. Sin embargo, Washington también ha declarado estar preocupado por las actividades de China en la región, las cuales son “peligrosas e ilegales”.
La postura contradictoria de Estados Unidos ha llevado a China a rechazar las reuniones bilaterales, principalmente porque considera que el despliegue militar en la región de naciones como Washington es la razón principal por la cual existe inestabilidad en la región. Además, la relación entre Estados Unidos y Taiwán sigue siendo un punto crítico para China, más aún luego de que Estados Unidos realice nuevos envíos de armas a la isla.
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