Desde que Hezbollah se apoderó del sur del Líbano, la organización ha continuado con sus destructivas actividades terroristas y, siendo aliada de Irán, es utilizada para atacar a sus supuestos enemigos, en este caso Israel. Desde el comienzo de la guerra de las “Espadas de Hierro”, Hezbollah participó en el apoyo a Hamás lanzando cohetes hacia el norte que alcanzaron a gran parte de la población de Israel. La situación se intensificó y Hezbollah, que tiene más de 150.000 misiles posicionados dirigidos a Israel, se siente seguro de atacar. Ante esta situación, hablamos con el coronel David Ram, quien después de luchar en Gaza fue enviado al norte de Israel.
G.S – ¿Cómo se prepara el ejército para controlar el conflicto en el norte de Israel?
Clnl.Ram – En este momento el ejército israelí se enfrenta a tres frentes diferentes, el primero es Gaza desde el 7 de octubre donde hay dos divisiones, el segundo es Judea y Samaria donde se pueden ver cada día actos terroristas como el último en la zona de Nablus, el cual se pudo detener y la tercera es la parte en el norte donde debemos defendernos contra los ataques de Hezbollah, especialmente ahora que los ciudadanos han evacuado sus hogares. No solo estamos preparados para la defensa sino que a su vez hemos pasado por meses de entrenamiento simulando un ataque al enemigo. El ejército se está entrenando intensamente para un posible ataque de nuestra parte hacia el Líbano, en caso de una posible escalada de los combates.
G.S – ¿Cómo afecta el desplazamiento de ciudadanos a la toma de decisiones?
Clnl.Ram – El desplazamiento de los habitantes del sur, por ejemplo, fue una decisión que se tomó el 7 de octubre cuando los terroristas ya estaban dentro; el desplazamiento de los ciudadanos del norte es diferente. Creo que fue un error, al vaciar todo Kiryat Shmona le dio al enemigo más libertad para disparar. Este desplazamiento es visto según Hezbollah como una victoria, y ahora nos encontramos en una situación que dificulta que los civiles regresen a sus hogares, son zonas que están directamente destruidas. En la situación actual, Israel necesita trabajar más rápido y fortalecer el norte, pero por el momento las reacciones no son fuertes.
G.S – ¿Cuáles serán las estrategias para poner fin a los ataques de Hezbollah?
Clnl.Ram – Israel tiene el problema de no definir sus objetivos y el enemigo lo está notando. Lo que está pasando ahora es resultado de las malas decisiones tomadas al salir de Gaza en el año 2005 aquí es donde Israel debería haber puesto una línea roja; por ejemplo, antes de reaccionar al más pequeño ataque, y no, de una granada, pasaron de tres a cien y así Hamás se fortaleció, llegando al 7 de octubre de 2023. Israel siempre da pasos a medias para resolver los problemas. Tiene que decidir si volveremos a 2006 como la segunda guerra con el Líbano. No hay que quedarse dormido ni esperar ataques, la mejor estrategia será una reacción fuerte y tomando áreas de control y estar siempre alerta con un solo mensaje: si nos atacan, atacamos, no esperaremos. Salimos de Gaza en 2005, ya no hay judíos allí, pero vimos lo que pasó. Basta, si nos dormimos con el Líbano, en unos años tendremos otra masacre. Hay que definir una zona concreta sin terroristas, esta zona debe estar bajo el control de un ejército extranjero, podría ser la ONU o la FPNUL, que realmente no hacen mucho, pero tiene que haber un ejército armado que controle el 100% la frontera. Pero este ejército no debe ser ni del Líbano ni de Israel.
¿En relación con la buffer zone, ¿cómo ve la situación sabiendo que Hezbollah todavía tiene cierta presencia en la región?
Clnl.Ram – Bueno, eso es exactamente lo que resalta en la pregunta anterior. En el año 2000, cuando Israel abandonó el sur del Líbano, las Naciones Unidas junto con el Comité de Seguridad Internacional, declararon la zona en cuestión zona de paz y al final, seamos honestos, no hicieron su trabajo y más que la paz, en 2006 estalló la segunda guerra en el Líbano cuando secuestraron a nuestros soldados en la frontera. Lo peor es que todo fue filmado y la ONU no informó nada en tiempo real para que Israel pudiera responder. Por lo tanto tengo que decir que no, no están haciendo su trabajo para mantener la paz; vemos la misma actitud en el área de Gaza, y es por eso que, lamentablemente, Israel no puede confiar en ellos. Decir que la ONU debería tener control sobre la zona de amortiguamiento es un error, aquí debería haber fuerzas armadas internacionales encargadas de detener todo tipo de ataques y no apoyar al terrorismo detrás de las bambalinas y como resultado, en la actualidad, Hezbollah sigue teniendo presencia en la zona. Lo mismo está pasando en el sur con Hamas. En fin, si hablamos de misiones de paz, la ONU nos ha fallado, incluso el terrorismo ha aumentado. Por lo tanto, la zona de amortiguación debe estar bajo el control de una fuerza que realmente tenga interés en mantener verdaderamente la paz en la región, lo que beneficiará no sólo a Israel, sino también a los ciudadanos del sur del Líbano que sufren la amenaza del terrorismo.
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