Entre los días 15 y 18 junio, la Marina de Brasil ejecutó un importante ejercicio de tiro con munición real en una ubicación designada en alta mar comprendida entre las ciudades de Rio de Janeiro y Cabo Frío. La actividad, denominada Operación “Lanzamiento de Armas II/2024”, comprendió la participación de medios de superficie, cazabombarderos AF-1 Skyhawk y helicópteros; destacando estos últimos al registrar el lanzamiento de dos misiles antisuperficie Rb 12 Penguin por parte de los SH-16 Seahawk brasileños.
Entre los objetivos señalados de la actividad, la Marina de Brasil listó “elevar el nivel de entrenamiento militar y mejorar la efectividad de los sistemas de armas, disparando contra un objetivo de superficie”. A tales fines se menciono la participación de la fragata clase Niteroi “Defensora”, aviones de ataque AF-1 Skyhawk y helicópteros SH-16 Sea Hawk, los cuales emplearon como objetivo para su ataque a uno de las antiguas corbeta clase Imperial Marinheiro, las cuales fueron dadas de baja y pasadas a reserva a principios de los años 2000´, tratándose del buque Caboclo (V-19).
Esta unidad fue emplea como blando como parte de la simulación de una situación donde un buque sospechoso, operado por una organización extremista, realizó un ataque contra una plataforma petrolera brasileña provocando una respuesta por parte de la Marina de Brasil.
Los SH-16 brasileños tuvieron la oportunidad de realizar los primeros disparados del ejercicio, cuando fue registrado que dos helicopteros ejecutaron el lanzamiento de dos misiles antisuperficie Rb 12 Penguin, el cual es parte de su armamento de dotación. Posteriormente, los AF-1ejecutaron el lanzamiento de bombas de propósito generales y realizaron pasajes donde ejecutaron el disparo contra el Caboclo con sus cañones de 20mm.
Posteriormente, fue el turno de la fragata Defensora, la cual se habia posicionado en una ubicación previa designada, siendo coordinado con el apoyo de un helicóptero AH-15B “Pegasus”, el cual también brindó tares de coordinación de los SH-16 Y AF-1. Lista y preparada, la tripulación del buque de la clase Niteroi inició su ataque a través del empleo del principal armamento de la unidad compuesto por su cañon de 4,5 pulgadas.
“Cada operación de Lanzamiento de Armas es muy importante para incrementar el nivel de entrenamiento de la Escuadrilla, los recursos navales y aeronavales, permitiendo asegurar que nuestros sistemas y equipos de armas estén perfectamente alineados y preparados para cualquier eventualidad que atente contra la seguridad de nuestra Patria. y las riquezas de nuestra inmensa Amazonía Azul”, expresó el Comandante del Grupo de Tarea de la Operación, también Comandante de la 2.ª División de la Escuadrilla, Contraalmirante Jorge José de Moraes Rulff.
*Fotografías Marina de Brasil.
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