Durante el día de ayer, la Jefa del Comando Sur de Estados Unidos, Comandante General Laura Richardson, mantuvo una reunión en Washington con el presidente de Paraguay, Santiago Peña. Durante el encuentro, se abordó una agenda con ejes asociados a la cooperación en materia de seguridad.
De acuerdo a lo revelado por el mandatario uruguayo en su cuenta oficial de X: “Con Laura Richardson, Comandante del Comando Sur de Estados Unidos, hablamos de seguridad regional y los avances en la cooperación que impulsamos; en materia tecnológica, los planes comunes en el combate al narcotráfico y los crímenes transnacionales. Además, destacó su respaldo a las fuerzas de seguridad del Paraguay, considerados aliados estratégicos en la región”.
En este sentido, dicho encuentro se enmarca dentro de una nueva estrategia más amplia de seguridad, defensa y geopolítica que lleva adelante el Comando Sur de Estados Unidos (SOUTHCOM) en América Latina. A esto se le suman las visitas oficiales de alto nivel geopolítico que realizó la general Richardson durante estos últimos tres años en países como Argentina, Uruguay y Chile.
El SOUTHCOM en América Latina
Ahora bien, primero cabe preguntarse primero: ¿Qué es el Comando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM)?. Bajo la dirección de la General del Ejército estadounidense, Laura Richardson, SOUTHCOM es unidad estratégica designada para desplegar una planificación de contingencia y operaciones de seguridad en las regiones de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe (excluyendo mancomunidades, territorios y posesiones de EE. UU.). La misma coordina sus actividades a través de direcciones, comandos componentes y Organizaciones de Cooperación en Seguridad distribuidas en su región de responsabilidad.
Desde que asumió el mando a finales de 2021, la General Richardson emprendió una serie de giras por Latinoamérica con el objetivo de profundizar el diálogo y la cooperación en materia de seguridad con líderes militares y de defensa de las diferentes naciones. Esto responde a una nueva estrategia geopolítica de Estados Unidos que se vio impulsada por la creciente presencia de China en América Latina, particularmente Argentina.
La nueva estrategia de Estados Unidos
¿Qué hay detrás de esta estrategia? Desde entrevistas hasta una presentación formal en el Congreso, Richardson fue una de las voces que expresó preocupación por la amenaza que la República Popular China (RPC) representa para Estados Unidos en esta región geoestratégica. Cuestionó la creciente presencia espacial china en América Latina, con al menos 10 instalaciones vinculadas al gigante asiático en cinco países latinoamericanos
Y particularmente en lo que refiere a las inversiones chinas en infraestructura crítica, advirtió que en países como Argentina, estas instalaciones – presentadas como proyectos pacíficos por China – podrían servir en realidad como puntos de acceso para fines militares y puntos de estrangulamiento naval estratégicos para el gigante asiático. Además, la funcionaria señaló que este tipo de infraestructura mejoraría drásticamente la capacidad de China para acceder a la región antártica, sus pesquerías y afectaría la movilidad estratégica de Estados Unidos en una “zona reservada para la paz y la ciencia”.
Lo cierto es que la influencia creciente de China en una región estratégica como América Latina, no hace más que desafiar la presencia y el poder tradicional de Estados Unidos. Pone en jaque a lo que tradicionalmente fue su “patio trasero” al invertir en infraestructura crítica, desarrollar proyectos de minería de recursos naturales claves para el avance tecnológico como son el litio y cobre, profundizar la cooperación militar y espacial.
Del mismo modo busca potenciar el intercambio comercial y financiero. Con un trabajo paulatino y silencioso de política y diplomacia, el gigante asiático logró convertirse en el principal socio comercial de las economías sudamericanas, el financiador más importante de proyectos en materia de tecnología espacial y militar, energética y minera. Enclaves estratégicos para potenciar el poderío de cualquier nación en el escenario internacional.
Es por esto que tanto las visitas como reuniones oficiales de la Jefa del Comando Sur con líderes políticos y militares latinoamericanos, busca impulsar una nueva estrategia de Estados Unidos en la región: Reforzar y crear alianzas claves con el objetivo de reducir así la dependencia y avance peligroso de rivales geopolíticos como son China y Rusia. Avance que podría reconfigurar el escenario mundial en un futuro, dejando al tradicional poderío de Estados Unidos atrás y ascendiendo a nuevos actores globales.
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