El pasado 19 de abril, la Armada de los EE.UU. celebró la reincorporación al servicio de uno de sus submarinos nucleares de ataque modernizados clase Los Ángeles, a saber, el USS Toledo (SSN 769). La novedad se produce al momento que la nave superó un proceso de revisión técnica a cargo del Astillero Naval de Norfolk (NNSY), en el que se lo reacondicionó y modernizó a fines de ampliar sus capacidades de combate y extender su vida útil estimada, labor que se llevó a cabo en un dique seco.
Ampliando en algunos detalles conocidos del proceso en cuestión, ha de mencionarse que para el submarino implicó la instalación de un nuevo periscopio, diversas pruebas en las salas de máquinas, una inspección estructural del casco y la reparación imprevista del sistema de dirección hidráulica. A fines de llevar a cabo estos trabajos, el Astillero Naval de Norfolk dispuso un Centro de Control de Operaciones (CCO) que permitiera la coordinación de mecánicos y supervisores involucrados en el proyecto, facilitando su labor en medio de la renovación de capacidades del astillero enmarcadas dentro del Programa de Optimización de la Infraestructura de Astilleros de la Armada de EE.UU; el cuál alcanza a los cuatro astilleros navales públicos.
Cabe recordar también, que la revisión técnica descrita forma parte del mantenimiento que los submarinos de la institución deben recibir a mediados de su vida útil, lo que en principio les garantiza su operatividad por una década más. Normalmente, además de los trabajos específicos antes mencionados que se realizaron sobre el USS Toledo, esto implica también la actualización de sus sistemas de navegación, de combate y de comunicaciones, a lo que ha de agregarse la revisión del sonar y otros sensores críticos.
Pasando revista brevemente por las características que hacen al submarino, ha de destacarse que se trata de un ejemplar puesto en servicio en el año 1995, siendo parte en la actualidad de la flota de 28 unidades actualmente operativas en la Armada de EE.UU; de 62 que fueron construidos. Hablamos de buques con un desplazamiento estimado en las 6900 toneladas, contenidas dentro de una eslora de 110 metros y propulsadas por un reactor nuclear del tipo S6G, mismo que le permite alcanzar velocidades de hasta 30 nudos sumergido. En términos de armamento, el USS Toledo presenta cuatro tubos lanzatorpedos de 533 mm y una docena de celdas del sistema VLS para desplegar misiles de crucero Tomahawk como sus principales bazas, lo que denota a su vez la gran flexibilidad operativa de su diseño.
*Imagen de portada: Shelby West
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