El Coronel FAP Carlos Manuel Zamora Cavero, Comandante del Grupo Aéreo No. 8, la unidad de transporte estratégico más poderosa de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), comparte sus reflexiones sobre los primeros 10 años del sistema Leonardo C-27J Spartan en el país sudamericano.
¿Cuál es el impacto que ha causado el sistema Leonardo C-27J Spartan en la Fuerza Aérea del Perú a diez años de su llegada al país?
El Spartan es una aeronave muy moderna que llegó para reemplazar a los Antonov An-32B. Su arribo ha permitido incrementar las capacidades de la institución, pues ahora no solo realizamos traslado de pasajeros y carga, también cumplimos con nuevas misiones como la extinción de incendios forestales usando el sistema ‘Guardian’ y las evacuaciones aeromédicas. El salto tecnológico dado es muy importante, al pasar del An-32, un avión muy noble pero de cabina analógica, dado de baja en el 2023, al Spartan, que es muy moderno y digital, y que permite cumplir con todos los requisitos para cruzar la cordillera de los Andes sin problemas. Este avión puede operar tranquilamente en todos los campos de altura, como Juliaca, Cusco o Jauja, y está demostrando, en estos diez años de servicios, ser muy versátil y cumplir con todas las demandas planteadas. Además, ha permitido al Grupo Aéreo No. 8 desarrollar y afianzar la capacidad de vuelo con visores nocturnos para misiones de transporte y apoyo logístico.
¿De qué manera el uso de los visores nocturnos con los Spartan ha mejorado las capacidades de la FAP?
El empleo de esta aeronave en misiones con el empleo de visores nocturnos nos brinda la capacidad de ingresar a aeródromos que carecen de sistemas de balizaje, luces o radio ayuda, como por ejemplo el de Mazamari, en horas de la noche. Allí, precisamente, realizamos evacuaciones de emergencia de los combatientes del VRAEM sin ninguna restricción y en cualquier momento. Una de las misiones críticas más recientes ocurrió el pasado 21 de febrero, cuando un Spartan voló de madrugada a la ciudad de Trujillo, donde colapsó un centro comercial, dotado con el equipamiento de camillas instaladas para atender la evacuación de las posibles víctimas, y luego en la configuración para llevar ayuda humanitaria. Todos los días tenemos tripulaciones en alerta en el Escuadrón Aéreo No. 844, listas para despegar lo más pronto posible a donde se requiera para cumplir con la misión asignada.
¿Cómo se ha desarrollado la formación de las tripulaciones?
Los primeros equipos se calificaron en Italia, pero hoy ya tenemos tripulaciones experimentadas que se encargan de brindar la instrucción a los nuevos, acá en el Perú. Y una vez al año enviamos a tripulaciones al extranjero para entrenarse en los simuladores de vuelo. También contamos con instructores propios en la FAP calificados en el uso de los visores nocturnos.
¿En qué consiste el sistema ‘Guardian’ de extinción de incendios forestales y qué resultados ha brindado hasta el momento?
Es un sistema muy moderno que nos ha permitido intervenir en la extinción de incendios forestales en las diversas regiones de nuestro país, especialmente en la zona norte. También estuvimos en Ecuador apoyando en el control de los siniestros, y prestamos asistencia a Colombia. El sistema está comprendido por cajas lanzables, cada una con capacidad de mil litros de agua, lo que permite al avión lanzar hasta seis unidades sobre el siniestro con el objetivo de apagarlo.
¿Se ha previsto incorporar más ejemplares del Spartan al Grupo 8 en el mediano plazo?
No podemos pretender que con solo cuatro aeronaves del modelo vamos a poder atender todas las demandas del Estado, se necesitan más unidades. Por ejemplo, para una acción cívica nos piden llevar 26 toneladas a Pucallpa (en la selva). Un Spartan podría trasladar en esa ruta poco más de 5 toneladas, lo que significa realizar muchos vuelos en varios días. Mientras tanto, se tienen que cumplir otras misiones más. Desde el Grupo 8, la Fuerza Aérea apoya a los diferentes ministerios para trasladar carga, personal o autoridades, y tenemos una aeronave para atender esas labores. Hay otro avión encargado de resolver las necesidades de la propia institución, como por ejemplo misiones de lanzamiento de paracaidistas… Y un aparato más se encuentra en su fase de mantenimiento. Es decir, si quisiéramos tener las cuatro aeronaves disponibles permanentemente, se debe contar con por lo menos seis. Recordemos que el proyecto de inversión consideró una flota de 12 ejemplares para atender todos los requerimientos de las entidades del Estado. Nosotros atendemos, además, auxilio ante situaciones de desastre, como el Fenómeno El Niño en el norte, heladas en el sur, sismos, y establecemos puentes aéreos humanitarios y vuelos de enlace a lugares apartados. Por eso, lo ideal es que nuestra flota de aeronaves se incremente.
¿Cómo se maneja el mantenimiento de la flota con el fabricante, Leonardo?
El mantenimiento tiene una gran importancia para nosotros. Cada 21 días, un Spartan debe entrar a una fase de inspección donde se cumplen con los diversos chequeos determinados por el fabricante. Eso nos permite mantener al sistema en las mejores condiciones operativas. Para ello, contamos con gente muy preparada aquí, en el Escuadrón de Mantenimiento No.806, además del apoyo del SEMAN Perú cuando es necesario. El año pasado, un equipo de expertos llegaron desde Italia con el encargo de preparar y certificar a nuestros técnicos FAP para que realicen las inspecciones tipo “chek C”, donde se revisa a profundidad todos los componentes de la aeronave. Además, tenemos un asesor de Leonardo permanente en nuestra base, en el marco del acuerdo para garantizar el soporte logístico integral de las aeronaves, lo que incluye la disposición de repuestos inmediato, que refuerza el stock que tenemos en nuestros almacenes. Todo eso nos da un buen nivel de operatividad.
En cifras:
Desde su llegada el 15 de marzo de 2015, los C-27J Spartan han cumplido un rol fundamental en el fortalecimiento de la capacidad operativa del país y, gracias a su versatilidad y robustez, han participado en diversas misiones en beneficio de miles de personas en todo el territorio nacional.
- Transporte de ayuda humanitaria a poblaciones alejadas.
- Evacuaciones aeromédicas y de emergencia para 827 pacientes.
- Transporte de tropas y pertrechos militares.
- *Vuelos de acción cívica.
- Apoyo a otras entidades del Estado
- Transporte de autoridades nacionales.
- *Apoyo ante desastres naturales.
- Lucha contra incendios forestales con 98.6 horas en misiones de extinción.
- 13 mil 833 horas de vuelo acumuladas.
- 214 mil 122 pasajeros transportados.
- 8 millones 33,943 kilogramos de carga movilizada.
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