Las negociaciones por la paz en Ucrania entran en una etapa decisiva con una serie de reuniones diplomáticas programadas en Arabia Saudita. Tras el reciente incidente en la Casa Blanca entre el presidente de EE.UU., Donald Trump, y su par ucraniano, Volodímir Zelenski, el diálogo bilateral se reanudó con un nuevo escenario de encuentros en Yeda. La delegación ucraniana buscará restablecer las conversaciones de paz y evaluar el futuro del apoyo estadounidense en la guerra que mantiene con Rusia.
Contexto de las tensiones entre Trump y Zelenski
El 28 de febrero, la reunión entre Trump y Zelenski en Washington finalizó abruptamente, marcando un punto de tensión en las relaciones bilaterales. La discusión se tornó pública cuando Trump cuestionó la postura de Zelenski en el conflicto, sugiriendo que el mandatario ucraniano “está jugando con la Tercera Guerra Mundial”. Como consecuencia, la Casa Blanca anunció la suspensión de toda ayuda militar, financiera y de inteligencia a Kiev, generando incertidumbre en el gobierno ucraniano.
Este episodio también afectó acuerdos económicos previamente negociados. Estados Unidos y Ucrania tenían previsto firmar un convenio sobre tierras raras, clave para la industria tecnológica y militar, pero la firma fue postergada tras la disputa diplomática.
Las reuniones en Arabia Saudita
En un intento por encauzar nuevamente el diálogo, Zelenski anunció que viajará a Arabia Saudita para reunirse el lunes con el príncipe heredero Mohammed bin Salmán. Posteriormente, una delegación ucraniana se quedará en Yeda para mantener conversaciones con funcionarios estadounidenses encabezados por el enviado especial de EE.UU. para Medio Oriente, Steve Witkoff.
Arabia Saudita ha tomado un rol central en la diplomacia internacional en el conflicto ucraniano. Bajo el liderazgo de bin Salmán, el reino ha buscado posicionarse como un mediador clave en las negociaciones de paz, facilitando el contacto entre Moscú, Kiev y Washington.
Objetivos de las negociaciones
El propósito principal de estas reuniones es restablecer un canal de comunicación entre EE.UU. y Ucrania, en un momento en el que el apoyo financiero y militar estadounidense es fundamental para Kiev. Según Witkoff, se pretende “establecer un marco para un acuerdo de paz y también un alto el fuego inicial”.
La disposición de Ucrania a negociar también ha sido interpretada como una estrategia diplomática tras la crisis con Trump. Según fuentes oficiales, Zelenski envió una carta a su par estadounidense expresando su compromiso con un proceso de paz “rápido y confiable”. En su comunicado oficial, el presidente ucraniano remarcó que su país sigue comprometido con una resolución negociada del conflicto.
El desenlace de estas reuniones podría definir el rumbo de la guerra en Ucrania. La necesidad de reanudar la cooperación con EE.UU. es una prioridad para Zelenski, especialmente tras la suspensión del apoyo militar. Por su parte, Trump ha dejado en claro que cualquier solución al conflicto debe contar con su aval y que Ucrania debe demostrar un compromiso real con la paz.
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