En medio de las negociaciones para alcanzar el cese de las hostilidades por la guerra en Ucrania, las tropas de Rusia recuperaron dos asentamientos en la región de Kursk. Según informó el Ministerio de Defensa de Moscú, se liberaron Pogrebkí y Orlovka el 26 de febrero, y el asentamiento de Nikolski al día siguiente.
El comunicado de la cartera rusa precisa que las unidades del grupo de tropas Norte continuaron eliminando formaciones armadas de Ucrania en este óblast, y las acciones ofensivas realizadas permitieron liberar estas ciudades. Técnicamente, se abatieron más de 1960 efectivos ucranianos en una semana.
Si bien no se pudo confirmar oficialmente por otros medios estas acciones en el campo de batalla, el reporte del Ministerio de Defensa de Rusia confirmó que fueron atacadas diversas unidades y posiciones ucranianas cerca de más de doce asentamientos. Kursk es la principal zona de acción, región que fue tomada por Ucrania a mediados del año pasado.
La ofensiva rusa y el orgullo de Zelenski
Las tropas rusas reportaron estar acercándose cada vez más a las unidades ucranianas en la región de Donetsk. Se suma a esta estrategia ofensiva el avance sobre el centro logístico de Pokrovsk, donde se encontraba una de las minas de carbón de coque para la fabricación de acero ucranianao.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, elogió a sus tropas por los “buenos resultados” en Kursk. Alabó a las unidades que se encuentran en la primera línea de la región de Donetsk por lanzar contraataques contra las fuerzas rusas. Además, en un discurso por video, Zelenski señaló que hace casi siete meses sus fuerzas “mantienen la zona tapón en el territorio agresor de Rusia”.
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