Como consecuencia de su gran poderío, SpaceX abarca la mayoría de las noticias sobre lanzamientos espaciales.
Sin embargo, poco a poco, otra empresa va ganando terreno: este fin de semana, Rocket Lab lanzó cinco satélites de “Internet de las cosas”.
Un cohete Electron de 18 metros despegó con las cinco unidades, para la compañía francesa Kinéis, desde el sitio de Rocket Lab en Nueva Zelanda.
El lanzamiento fue el cuarto de los cinco que Rocket Lab está llevando a cabo para construir la constelación de 25 nanosatélites de Kinéis en órbita terrestre baja.
La constelación de Kinéis
Una vez que la constelación esté en pleno funcionamiento, Kinéis podrá “conectar cualquier objeto desde cualquier parte del mundo y transmitir datos útiles de estos objetos a los usuarios casi en tiempo real”.
“Estos datos son una herramienta de toma de decisiones que se puede utilizar para optimizar las actividades y reducir los riesgos, gracias a tres funciones esenciales: seguimiento, monitoreo y alerta”, agregó la descripción de la misión.
Los cinco satélites fueron desplegados en una órbita circular de 646 km de altura, unos 66,5 minutos después del lanzamiento.
Los servicios de Kinéis podrían estar disponibles este mismo 2025, utilizando los primeros 10 satélites. Sin embargo, no han dado más detalles al respecto.
Rocket Lab va por más
Este fue el primer lanzamiento de Rocket Lab en lo que va del año y el 59 en total desde que se creó la compañía.
En 2024, lanzó un total de 16 misiones: 14 vuelos orbitales con Electron y dos excursiones suborbitales con HASTE. Este último es una versión modificada del cohete que ayuda a los clientes a probar la tecnología hipersónica.
La ventaja de Rocket Lab es que ha encontrado un nicho para los clientes que buscaban lanzamientos de satélites pequeños y están dispuestos a pagar una prima en comparación con las alternativas de viajes compartidos como las misiones Transporter y Bandwagon de SpaceX.
Tal vez te interese: Rocket Lab pone en órbita su satélite número 200