Con el objetivo de incrementar la capacitación del personal y formar especialistas capaces de operar en aguas polares, esta semana concluyó el Primer Curso de Buceo en Aguas Polares dictado por la Escuela de Buceo de la Armada Argentina (ESBU). Este programa, desarrollado en la Base Conjunta Carlini, marcó un hito al ser la primera vez que se realiza en la Antártida, en coordinación con el Comando Conjunto Antártico, para preparar a los buzos que desempeñarán tareas científicas y logísticas en condiciones extremas durante 2025.
El programa incluyó dos semanas de instrucción teórica y práctica en la ESBU, seguidas de una etapa final en la Antártida. En esta fase, los cursantes, acompañados por el Teniente de Navío Juan Cruz Arguello y el Suboficial Principal Arnaldo Gay, enfrentaron los desafíos del buceo bajo hielo en el Mar Antártico. Los cuatro participantes, dos pertenecientes a la Armada (Agrupación Buzos Tácticos y Agrupación de Comandos Anfibios) y dos al Ejército Argentino, se sometieron a rigurosas evaluaciones para garantizar su desempeño en condiciones extremas.
Al respecto, el Teniente Arguello destacó: “Esto marca un hito para la capacitación operativa en la Antártida, donde la Escuela de Buceo de la Armada Argentina llevó a cabo por primera vez el curso de Buceo en Aguas Polares en una Base Antártica Conjunta. Capacitar al personal directamente en la Antártida no solo optimiza los recursos, sino que permite una adaptación más rápida a las bajas temperaturas, la escasa visibilidad y la formación de hielos flotantes, que son desafíos que los buzos deberán enfrentar a diario”.
Dentro de las actividades realizadas se evaluaron aspectos como la planificación, supervisión y ejecución de inmersiones en aguas gélidas, así como la respuesta ante emergencias climáticas y la interacción con la fauna local. Según Arguello, “Con esta formación, la Armada Argentina no solo fortalece sus capacidades operativas, sino que también refuerza su compromiso con la investigación científica y el sostenimiento logístico en la Antártida. Este curso establece un nuevo estándar para futuras capacitaciones en el continente blanco”.
La Base Conjunta Carlini (Ex Jubany) es reconocida mundialmente por su actividad científica, y el buceo en aguas polares resulta indispensable para tareas como la recolección de muestras biológicas, el mantenimiento de equipos submarinos y la inspección de infraestructuras críticas. Este curso inaugural refuerza el compromiso de la Armada Argentina con la ciencia y la soberanía en la región más austral del planeta.
*Créditos de las imágenes: Gaceta Marinera – Armada Argentina.–
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