El uso de drones por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha transformado significativamente sus tácticas en los últimos años, especialmente en Cisjordania y en el contexto de la actual guerra contra Hamás. Esta revolución tecnológica no solo ha redefinido el combate contra grupos terroristas, sino que también ha mostrado cómo la innovación puede integrar inteligencia y operaciones militares en terrenos complejos.
Un cambio estratégico en Cisjordania
Desde el fin de la Segunda Intifada en 2005 hasta mediados de 2023, las FDI habían evitado el uso de ataques aéreos en Cisjordania. Sin embargo, esto cambió durante la operación militar en Jenín en el verano de 2023, marcando el inicio de una nueva etapa en la que los drones se convirtieron en herramientas clave para neutralizar amenazas.
Según declaraciones recientes del coronel “M”, jefe de objetivos en Judea y Samaria, y el mayor “N”, comandante de drones de las FDI al Jerusalem Post, el despliegue de estas aeronaves no tripuladas ha permitido integrar datos de inteligencia en tiempo real con las maniobras de las tropas terrestres. Esto ha llevado a resultados tácticos concretos, como la identificación y eliminación de células terroristas en refugios clave, incluyendo los campos de refugiados de Tulkarm y Nur Shams.
Inteligencia en tiempo real y precisión operativa
El mayor “N” destacó que las operaciones con drones funcionan las 24 horas, los siete días de la semana, proporcionando información inmediata sobre movimientos enemigos y posibles amenazas. Un ejemplo reciente fue la eliminación de una célula terrorista en Yenín, que planeaba un ataque inminente contra fuerzas israelíes y civiles. Este operativo fue llevado a cabo en coordinación con el Shin Bet, uniendo recursos de inteligencia y capacidad operativa.
Además, los drones han sido fundamentales para monitorear el tráfico de armas hacia grupos terroristas. Según las FDI, países como Irán estarían detrás de la transferencia de armamento avanzado a través de redes clandestinas en Cisjordania. Estas actividades han sido combatidas mediante ataques precisos que desarticulan tanto a las células armadas como sus redes logísticas.
Innovación y colaboración en el frente
Uno de los aspectos más innovadores de esta estrategia ha sido la coordinación entre las distintas unidades de las FDI. Los operadores de drones trabajan en estrecha colaboración con fuerzas terrestres y otras agencias de seguridad, como el Shin Bet, asegurando que las operaciones sean integrales y efectivas.
El coronel “M” explicó cómo los drones proporcionan una sensación de proximidad entre las fuerzas en el terreno y las que operan desde bases remotas. “Nuestro personal de drones se siente como si estuviera con los combatientes en los callejones de Cisjordania”, comentó. Esta integración ha sido clave para el éxito de misiones complejas en áreas densamente pobladas, donde el enemigo utiliza a la población civil como escudo.
El impacto en la guerra contra Hamás
La guerra actual ha llevado esta revolución tecnológica a otro nivel. Los drones no solo han sido esenciales en Cisjordania, sino también en operaciones contra Hamás en Gaza y otras regiones. Según las FDI, los ataques aéreos han permitido cerrar círculos operativos, eliminando a responsables de atentados recientes y desarticulando amenazas antes de que se concreten.
El mayor “N” subrayó el orgullo que sienten por su rol en la defensa de Israel: “Tuvimos un sentimiento de tremenda satisfacción al defender a nuestro país de estos peligrosos terroristas”.
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