La entrega de los primeros tanques Leopard 1A5 a Ucrania, que tomó 19 meses, manifiesta una las principales dificultades logísticas en la cooperación internacional para apoyar al país frente al avance de Rusia. Este modelo, reacondicionado por un consorcio liderado por Alemania junto a Países Bajos y Bélgica, se convertirá en el tanque occidental más numeroso en las filas ucranianas, superando incluso a los Leopard 2, M-1 y Challenger 2.
“La única manera de minimizar los riesgos es utilizar estos tanques estratégicamente”, explicó un oficial ucraniano a medios locales citados por Forbes. Sin embargo, los Leopard 1A5 no fueron desplegados en los frentes más peligrosos, como el óblast de Kursk, donde se utilizaron los avanzados Leopard 2A6 y M-1.
El reciente envío de otros 45 tanques y equipos adicionales, incluidos camiones blindados y artillería, refuerza el apoyo de Alemania, que hasta la fecha proporcionó casi 7.000 millones de euros en ayuda militar y humanitaria a Ucrania. A pesar de estos esfuerzos, el retraso inicial resalta los desafíos de coordinar la producción y entrega de equipos en tiempos de guerra.
“Es crucial garantizar que las entregas sean más rápidas y eficientes”, afirmó un analista militar europeo al medio Forbes. La demora no solo afecta la capacidad operativa ucraniana, sino que también da margen a Rusia para consolidar posiciones estratégicas, complicando la contraofensiva ucraniana.
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Fuente: Forbes
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