Cómo parte del refuerzo de las relaciones en un entorno cada vez más complejo, bombarderos estratégicos B-52H de la Fuerza Aérea de EE. UU. y cazas F-15J de las Fuerzas de Autodefensa de Japón realizaron días atrás un ejercicio bilateral en el Mar de Japón. Así fue comunicado por las Fuerzas Combinadas de EE. UU. y Japón, donde estos señalaron que el ejercicio reafirmó la firme intención de los dos países de no tolerar cambios unilaterales del statu quo por la fuerza.
El ejercicio que se llevó a cabo durante el día 16 de diciembre se dio en el espacio aéreo sobre el Mar de Japón, y el Mar de China Oriental hasta el Océano Pacífico Occidental, al sureste de Okinawa. En ese marco se llevaron a cabo vuelos en formación y ejercicios tácticos (incluido el entrenamiento antiaéreo defensivo).
En cuanto a las unidades participantes en el ejercicio, se incluyeron cazas de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón. Por parte de la JASDF (Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón), participan tres F-15 de la 5ª Ala Aérea, tres F-15 de la 6ª Ala Aérea y siete F-15 de la 9ª Ala Aérea. En cuanto a la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, las unidades incluyen un B-52, cuatro F-35A, cuatro F-18, cuatro F-22, seis F-16 y tres EA-18G.
El único B-52H Stratofortress (número de serie de la Fuerza Aérea 61-0018) está asignado a la 5.ª Ala de Bombarderos de la Base Aérea Minot, en Dakota del Norte. Por otro lado, algunos medios señalan que los F-16 probablemente son los que están desplegados actualmente en Kadena, ya que el ejercicio se llevó a cabo al sureste de Okinawa, aunque Estados Unidos también tiene F-16 desplegados en la base aérea de Misawa, en el norte del país. De manera similar, los Growlers podrían ser del CVW-5 de Iwakuni o de Kadena, porque este último actualmente alberga seis EA-18G del Escuadrón de Ataque Electrónico-131 (VAQ-131) “Lancers” que llegaron a la base en septiembre de este año.
Este ejercicio también ha sido interpretado como un mensaje relacionado con un reciente despliegue de bombarderos estratégicos de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas (VKS) y la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (PLAAF) en el Mar de Japón, a finales de noviembre. Dicho despliegue, que incluyó patrullas tanto individuales como combinadas, fue monitoreado por las Fuerzas de Autodefensa de Japón.
Por otro lado, para diversos medios este posiblemente haya sido uno de los ejercicios aéreos bilaterales más grandes de los últimos tiempos en términos de números de unidades aéreas participantes. Además, esto se conjuga con lo expresado por el Ministerio de Defensa de Japón donde menciona que las formaciones se llevaron a cabo“en medio de un entorno de seguridad cada vez más severo en torno a Japón tras la intensificación de las actividades relacionadas con la seguridad nacional de Japón”
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