La Cámara de Diputados dio luz verde este martes a la ley que implementa la Boleta Única de Papel, lo que supone un cambio en el sistema electoral. El proyecto fue aprobado con 143 votos a favor, 87 en contra y solo 5 abstenciones. Los bloques que respaldaron la iniciativa fueron La Libertad Avanza, el PRO y la UCR.
¿Cómo funciona la Boleta Única de Papel?
Este ajuste, impulsado aunque no redactado por el oficialismo, transforma la manera en que los ciudadanos emitirán su voto. Según los defensores de la propuesta, la Boleta Única de Papel reduciría los costos de las elecciones y promovería una mayor transparencia. En contraste, la oposición, liderada por Unión por la Patria, rechazó el proyecto, argumentando que el sistema actual no presenta pruebas de fraudes electorales.
Ya no existirán múltiples boletas de diferentes partidos en el cuarto oscuro, y será el Estado quien se encargue de confeccionar una única boleta oficial para las próximas elecciones. También se ocupará de imprimir afiches con las listas completas, que estarán visibles al momento de votar. Antes de esta ley, cada partido debía imprimir sus propias boletas.
Además, los partidos ya no tendrán que vigilar sus boletas en cada mesa, eliminando uno de los focos de conflicto habitual en cada elección. Tampoco dependerán exclusivamente de sus recursos económicos para distribuir más ejemplares durante las campañas o para el reparto. Se estipula también que todos los candidatos estarán representados de manera más equitativa, ya que cada partido dispondrá de su propio espacio en la boleta.
Los argumentos a favor del nuevo sistema electoral
Quienes apoyan este nuevo formato resaltan que disminuye los costos, tiene un impacto ambiental positivo al reducir la cantidad de papel impreso, y elimina la estrategia de crear partidos políticos solo para recibir fondos de la Dirección Nacional Electoral destinados a la impresión de boletas. Asimismo, aseguran que este sistema genera un balance entre oficialismos y oposiciones, y entre partidos nuevos y grandes, sin otorgar ventajas a ninguna parte. No obstante, los detractores advierten que podría aumentar las posibilidades de fraude y manipulación electoral.
La boleta de papel unificará toda la oferta electoral para cargos nacionales en una única hoja. Estará dividida en filas horizontales según la categoría y el cargo, y en columnas verticales por cada agrupación postulada. El votante elegirá una opción por categoría, marcando en el casillero correspondiente. Si una agrupación política no presenta candidatos para alguna categoría, se incluirá la inscripción “No presenta candidato”.
El voto puede ser anulado si se marcan dos o más casilleros, y se considerará en blanco si no se marca ningún casillero. No habrá un casillero específico para el “voto en blanco”.
Por último, las listas de candidatos deben estar acompañadas de carteles que serán colocados en cada cabina de votación, asegurando una buena visibilidad.
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