El Gobierno de Israel actualizó los objetivos oficiales en su guerra contra Hamás en Gaza para incluir un cuarto, considerado clave: el retorno seguro de los residentes del norte del país a sus hogares. Esta decisión, anunciada por la Oficina del Primer Ministro Netanyahu, llega luego de 11 meses de intensos y constantes ataques de Hezbolá en dicho territorio.
A través de un comunicado oficial, el gabinete de seguridad señaló que “Israel seguirá actuando para lograr este objetivo”, enfatizando la importancia de permitir que las comunidades afectadas puedan regresar a sus hogares. Desde los ataques del 7 de octubre de 2023, cuando Hamás lanzó su ofensiva sobre el sur de Israel, Hezbolá intensificó sus ataques en el norte, lo que obligó a decenas de israelíes a desplazarse.
Hasta la fecha, los objetivos de Israel en la guerra incluían tres pilares: la eliminación de la capacidad militar y gubernamental de Hamás, la liberación de los rehenes y la garantía de que Gaza no volvería a representar una amenaza para Israel. Sin embargo, la constante amenaza que representa Hezbolá desde el Líbano llevó al Gobierno israelí a replantear sus prioridades.
Estados Unidos intenta mediar la paz con un enviado a Israel
A este hecho se suma la reciente visita del enviado especial de Estados Unidos, Amos Hochstein, a Israel. Analistas coinciden que su llegada podría tener que ver con este cambio en la estrategia, ya que Hochstein ha intentado mediar para lograr una solución diplomática que frene la escalada de violencia que podría alcanzar a la región.
En este sentido, durante una reunión con el ministro de Defensa, Yoav Gallant, que tuvo lugar el lunes, este último insistió en que solo una intervención militar podría garantizar el retorno seguro de los residentes desplazados. “La única forma de asegurar el retorno de nuestras comunidades será mediante una acción militar contra Hezbolá”, señaló Gallant, citado por The Times of Israel.
Pero Hochstein advirtió a Gallant que una ofensiva israelí de gran escala contra Hezbolá no facilitaría el retorno de los evacuados del norte a sus hogares, sino que podría incrementar el riesgo de una prolongada guerra regional, según reveló una fuente cercana al asunto al medio The Times of Israel. La misma fuente indicó que el enviado estadounidense expresó al ministro de Defensa el respaldo de Estados Unidos a una solución diplomática para reducir las tensiones con Hezbolá, ya sea mediante un alto el fuego en Gaza u otro mecanismo.
Mientras que por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, comentó a Hochstein en su encuentro del lunes que Israel no podrá permitir el retorno de sus 60.000 residentes evacuados al norte del país “sin un cambio fundamental en la situación de seguridad”.
** Enviado especial en Israel: Alejo Sanchez Piccat
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