En una maniobra militar significativa, China envió el fin de semana un dron militar cerca del espacio aéreo de Taiwán, horas antes de que la isla comenzara sus ejercicios militares anuales Han Kuang. Estos ejercicios, que simulan la defensa contra una invasión anfibia, vieron a los F-16V Fighting Falcons de Taiwán desplazarse hacia refugios en la costa este, anticipando un ataque simulado de las fuerzas de cohetes de China.
El Ministerio de Defensa de Taiwán informó que también se detectaron una docena de aviones chinos y al menos siete buques de guerra en las inmediaciones de la isla en las 24 horas previas al martes. Un mapa publicado por Newsweek reveló la trayectoria de vuelo del dron en rojo brillante, entrando en la zona de identificación de defensa aérea de facto de Taiwán, al sur de la línea media del Estrecho de Taiwán, antes de rodear las costas orientales de la isla.
Además, la cartera de defensa de Taiwán indicó que monitoreó de cerca los movimientos militares chinos, desplegando aviones de patrulla aérea, buques navales y sistemas de misiles costeros. Aunque no se comentaron las posibles conexiones entre el vuelo del dron y los ejercicios Han Kuang.
El vuelo del dron chino también despertó la atención de Japón, un aliado cercano de Estados Unidos en la región, que desplegó aviones de combate para interceptar al dron cerca de su zona de defensa aérea. En reiteradas oportunidades, Japón puso de manifiesto su preocupación por el impacto potencial que un conflicto en Taiwán podría tener en la seguridad doméstica y regional.
Esta incursión subraya una vez más la constante presión militar que China ejerce sobre Taiwán, que considera como parte de su territorio. Desde abril de 2023, esta es la sexta vez que un dron chino sobrevuela la isla principal de Taiwán, según Ben Lewis, un analista de defensa con sede en Washington.
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