En vísperas de los ejercicios militares anuales de Taiwán, el presidente Lai Ching-te ha lanzado un mensaje esperanzador y desafiante a las fuerzas armadas taiwanesas. Haciendo referencia a la historia militar global, Lai sostuvo que “unos pocos pueden vencer a muchos”, una declaración que resuena profundamente en un momento de creciente presión militar por parte de China.
El mensaje de Lai llega en un contexto tenso, donde China ha intensificado sus maniobras militares alrededor de la isla, presionando a Taipéi para que acepte su soberanía. A pesar de ser considerablemente más pequeñas, las fuerzas armadas taiwanesas han emprendido un ambicioso proceso de modernización y adaptación, adoptando estrategias de “guerra asimétrica” que buscan neutralizar la superioridad numérica y tecnológica del ejército chino.
La estrategia de “guerra asimétrica”
Taiwán ha implementado una serie de reformas y actualizaciones en su defensa, destacando la adquisición de nuevos equipos como submarinos y el desarrollo de tecnologías avanzadas. Esta modernización incluye la movilización de misiles montados en vehículos y drones, lo cual permite a sus fuerzas ser más móviles y difíciles de atacar. Lai, vistiendo uniforme militar, subrayó que la fortaleza militar no se mide simplemente en términos de cantidad de equipo, sino en la efectividad de las estrategias empleadas.
Preparativos para los juegos de guerra Han Kuang
El próximo 22 de julio, Taiwán iniciará sus ejercicios Han Kuang, que durarán cinco días y estarán acompañados por los simulacros de defensa civil Wan An. Estos ejercicios buscan ser lo más realistas posibles, simulando combates auténticos en respuesta a la “amenaza enemiga” creciente por parte de China.
En contraste, China realizó recientemente dos días de maniobras militares alrededor de Taiwán, como respuesta a la asunción de Lai en mayo. Estas maniobras fueron calificadas por Pekín como un “castigo” debido al discurso de investidura de Lai, el cual fue visto como separatista.
La postura de Taiwán ante las amenazas chinas
Lai ha sido claro en su rechazo a las reclamaciones de soberanía de Pekín, insistiendo en que solo el pueblo taiwanés puede decidir su futuro. A pesar de reiteradas ofertas de diálogo, China ha rechazado cualquier tipo de conversación, manteniendo su postura de reunificación.
“La paz que queremos es una paz con cimientos sólidos, una paz verdadera que debe establecerse con nuestra propia fuerza”, declaró Lai en la base aérea de Taichung. Ante la pregunta de un piloto sobre si el enfoque en la autosuficiencia defensiva podría ser interpretado como una preparación para la guerra, Lai reafirmó su compromiso con la paz, pero destacó que esta paz debe estar respaldada por una sólida capacidad de defensa.
Te puede interesar: Descubren tecnología fabricada en China en una base militar de Taiwán
Si te gustó este artículo, seguinos con un click en y suscribite a nuestros videos en YouTube .