Expertos en asuntos internacionales han observado un cambio significativo en la política exterior de Argentina esta semana, lo que podría tener importantes implicaciones para Estados Unidos y China. La decisión de Argentina de comprar aviones de combate F-16 fabricados en Estados Unidos y su anuncio de asociarse con el ejército estadounidense en una base naval en el extremo sur de América del Sur han generado comentarios sobre el impacto a largo plazo de estas acciones.
La elección de Argentina de adquirir 24 F-16 de Dinamarca en lugar de considerar una oferta china para obtener aviones de combate JF-17 ha sido vista como una decisión inevitable, dada la posición política pro libertad y anticomunista del presidente argentino Javier Milei, según los analistas. Esto ha sido considerado un revés para China, que ha estado buscando vender sus aviones a Argentina durante más de una década.
Los expertos también resaltan la importancia estratégica de la asociación entre Argentina y Estados Unidos en una base naval cerca del Estrecho de Magallanes. Esta asociación bloquearía efectivamente el acceso de China al Atlántico Sur desde el lado occidental y obstaculizaría su posible control sobre el Estrecho de Magallanes, un punto de tránsito vital entre los océanos Atlántico y Pacífico.
La incidencia de Estados Unidos que provocó el cambio en la política exterior argentina
La visita del general Laura Richardson del Comando Sur de Estados Unidos a Argentina, junto con los planes de transferencia de armas y la cooperación en defensa entre ambos países, señala un cambio en el enfoque de Estados Unidos hacia América Latina. Richardson detalló la ayuda militar que Estados Unidos proporcionará a Argentina, incluyendo cazas F-16 y vehículos blindados, así como la inversión en infraestructura de defensa.
Además, Argentina ha expresado su interés en convertirse en un socio global de la OTAN, lo que indica una mayor alineación con los intereses y estándares occidentales en materia de defensa y seguridad. Estados Unidos ha mostrado su apoyo a Argentina al proporcionar fondos para la compra de los aviones F-16, lo que marca la primera vez en casi dos décadas que Argentina recibe financiamiento militar extranjero de Estados Unidos.
Estas acciones reflejan un cambio en la dinámica de poder en la región y sugieren una mayor cooperación entre Argentina y Estados Unidos en materia de defensa, lo que podría tener implicaciones significativas para la influencia de China en América Latina.
Te puede interesar: Con Argentina incluida, países de América y Europa exigen a Hamás la liberación inmediata de rehenes en Gaza
Si te gustó este artículo, seguinos con un click en y suscribite a nuestros videos en YouTube .