El Ministro de Defensa de Australia, Richard Marles, anunció un aumento significativo en el gasto en defensa durante la próxima década, destinado a transformar a las fuerzas armadas del país en una fuerza más focalizada en medio de la creciente rivalidad entre Estados Unidos y China. Este aumento de 50 mil millones de dólares australianos se reveló junto con la presentación de la primera Estrategia de Defensa Nacional de Australia, la cual surge de una revisión que identificó la falta de preparación del ejército debido a cambios estratégicos regionales.
El plan incluye asignaciones financieras para la adquisición de submarinos de propulsión nuclear y la detención de la compra costosa de aviones de combate F-35 adicionales. El gobierno ha descrito este cambio como histórico, transformando el ejército hacia una fuerza altamente enfocada en la disuasión y la guerra en el Indo-Pacífico, con nuevas capacidades en el mar, tierra y aire en los próximos años.
¿Cuál es el objetivo detrás de esta medida?
El objetivo es aumentar el gasto en defensa en más de 50 mil millones de dólares en la próxima década, con miras a alcanzar los 100 mil millones para 2033, representando un 2.4% del PIB. Sin embargo, algunos críticos consideran que estas medidas son insuficientes y tardías, argumentando que el aumento planificado apenas supera la tasa de inflación, lo que significa que en términos reales no hay un aumento significativo en la financiación de la defensa.
El gobierno también ha anunciado recortes en algunos programas existentes para redirigir fondos hacia áreas prioritarias, como la inversión en nuevos misiles de largo alcance. Se espera que la mayor parte del presupuesto se destine a capacidades submarinas y a un acuerdo de seguridad con Estados Unidos y el Reino Unido para adquirir submarinos y mejorar la infraestructura relacionada.
A pesar de estos planes, ha habido críticas sobre la falta de claridad y detalles específicos en la estrategia de defensa, así como preocupaciones sobre los recortes presupuestarios en un momento de crecientes desafíos estratégicos. Algunos analistas y políticos han expresado su preocupación por la efectividad y la transparencia de estas medidas, argumentando que el gobierno necesita proporcionar una visión más clara y concreta sobre cómo se implementarán y financiarán estos cambios en el ejército australiano.
Fuente: Nikkei Asia
Te puede interesar: Con China como principal desafío, EE.UU., Reino Unido y Australia reafirman la alianza AUKUS para operar submarinos nucleares
Si te gustó este artículo, seguinos con un click en y suscribite a nuestros videos en YouTube .