Con el arribo del primer avión de transporte Embraer C-390 Millennium, la Fuerza Aérea de Hungría ha iniciado el camino para la modernización de su ala de transporte. La aeronave, que durante las pasadas semana completó vuelos de prueba y certificación en Brasil, fue recibida en el marco de una ceremonia oficial siendo presidida por el Secretario de Política de Defensa Zsolt Kutnyánszky.
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Al respecto, desde la cartera de defensa de Hungría indicaron que: “Las capacidades del KC-390 marcan el comienzo de una nueva era en la historia de la fuerza aérea húngara”. Esta primera aeronave fabricada por Embraer en Brasil arribó el pasado 12 de abril a la Base Aérea Kecskemét, en donde serán realizadas una serie de pruebas y evaluaciones a fin de comenzar un proceso de familiarización de las futuras tripulaciones.
Esta aeronave es una de las dos adquiridas por Hungría para equipar a su Fuerza Aérea como parte de un programa de renovación de sus Fuerzas Armadas. Con su incorporación el país concretará el reemplazo de sus antiguos AN-26, buscando expandir sus capacidades de transporte, como la de apoyo de su ala de combate constituida en estos momentos por los cazas Gripen. También su adquisición responde a incrementar las capacidades de evacuación médica, ya que esta avión incorpora una novedosa unidad de cuidados intensivos/unidad de transporte de pacientes.
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Sin embargo, como fuera informado ayer por la cartera de defensa del país europeo, la aeronave regresará a Brasil próximamente para finalizar su fase de alistamiento final. Se espera que la incorporación definitiva de este C-390 tenga lugar durante el próximo otoño europeo; mientas que el segundo ejemplar, actualmente siendo construido por Embraer sea recibido durante el próximo año 2025.
Por último, y en lo referido a este primer vuelo con destino a Hungría, el C-390 completó un vuelo de 12 horas partiendo desde Brasil con escala en la Islas Canarias y desde allí con destino a Hungría. Según lo expresado por la tripulación, “(…) Debido a las características de la tecnología, solo pudimos realizar algunas pruebas aquí, en Kecskemét, y regresaremos a Brasil para la última fase del proceso de desarrollo”.
*Fotografías: Fuerzas de Defensa de Hungría.
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