Sin lugar a dudas, uno de los programas más ambiciosos de la Armada de los Estados Unidos es la construcción de la nueva generación de portaaviones de propulsión nuclear Clase Gerald R. Ford. Hasta la fecha, la fuerza ya cuenta en servicio con la primera unidad que da nombre a la clase, el USS Gerald R. Ford, mientras que se avanza en la construcción de la segunda y tercera unidad. No obstante, un programa de esta envergadura no está exento de retrasos y dificultades. Uno de estos retrasos ha sido informado a través de documentos oficiales que expresan el aplazamiento en la entrega del USS Enterprise (CVN-80), el tercer portaaviones de la clase.
En el marco de la presentación de los presupuestos para el Año Fiscal 2025, las Fuerzas Armadas de Estados Unidos están llevando a cabo diversos recortes, a la vez que priorizan algunos programas sobre otros, o, en el peor de los casos, los cancelan. Así lo demuestra la reciente cancelación del Programa FARA del Ejército de los Estados Unidos, así como la reducción en el pedido original de helicópteros MH-139A Grey Wolf del USAF.
Dentro de este contexto, la US Navy también está ajustando varios planes de construcción naval. Una de estas decisiones implica a los nuevos portaaviones de clase Gerald R. Ford. Según los documentos mencionados, se han reportado “retrasos en la disponibilidad de materiales y el desempeño de la industria/cadena de suministro“, lo que está afectando al cronograma de entregas establecido por el astillero HII’s Newport News Shipbuilding, ubicado en el Estado de Virginia.
Estos problemas afectarían al portaaviones USS Enterprise (CVN-80), cuya fecha de entrega a la US Navy estaba originalmente fijada para el mes de marzo del año 2028. La nueva fecha estipula un retraso de 18 meses, fijando la incorporación de este buque para el mes de septiembre del año 2019.
Además de esta situación, de la que han informado medios locales, se ha destacado otra cuestión desde diversos ámbitos. En una de las reuniones más recientes sobre presupuesto y rendición de cuentas, las autoridades navales han dado a conocer que pospondrán hasta el Año Fiscal 2030 la compra del quinto (CVN-82) y sexto (CVN-83) portaaviones de la clase. Originalmente, esta decisión estaba prevista para ser firmada en el Año Fiscal 2028.
Esta situación ha dejado “extremadamente decepcionado” al astillero HII, que ha expresado su preocupación sobre la posibilidad de más retrasos en caso de que la Armada de Estados Unidos avance en la adopción de otro enfoque para la adquisición de esta clase de buques.
Como señala el sitio USNI News en una publicación reciente, “Los ejecutivos de HII han abogado por dos compras conjuntas de portaaviones, con tres años de financiamiento anticipado de adquisiciones antes de cada entrega de buque, y un cronograma que construye los portaaviones en centros de cuatro años para mantener tanto la fuerza laboral como la base de proveedores“.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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